sábado, 12 de diciembre de 2015

Dioses

Los dioses no murieron,
pero cada vez hay menos. 

¿Qué es esa entelequia que
conocen como república?
¿Y esa otra que llaman
democracia? ¿Qué dios
convoca a la igualdad y
la fraternidad entre los
pueblos y las personas?

Sólo ideas naftalinadas,
añejas expresiones de
deseos minoritarios.

Ni siquiera los dioses de
mirra e incienso que el
Oriente lejano e impreciso
había legado al Occidente
pretendidamente preclaro
se pronuncian.

Los dioses del yo y del
felicismo exacerbados
subsisten el trance,
la partida inexorable
solamente.