El chico que quería ser normal
no podía dejar de pensar...
Escuchaba canciones mainstream
para no desencajar...
Salía a hacer compras al mercado
local y consumía sin parar...
Se mantenía casi siempre en silencio
para no desvariar...
Decía o hacía lo que el promedio
de la gente suele esperar
de un chico muy normal.
El chico que quería ser normal
estaba perdido en una maraña de
espacio y tiempos distintos,
con muchos recodos de
duda y perplejidad…
¡Qué difícil era seguir
queriendo ser normal!
En el fondo, él sabía
-nosotros sabíamos-
que no hay nada
más odioso que
ir contra
uno mismo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario