sábado, 23 de junio de 2012

Preguntas


Y habiendo vivido ya un cuarto de siglo, llega, inevitable, la pregunta: ¿cuántos próximos habrá?, ¿cuántos tiempos, lugares, momentos, aromas, recuerdos nuevos habrá? 
¿Cómo sería acumular todas las experiencias de un año completo en un solo día, sol y luna, frío y calor, agua y sed y amor y desamor?
¿Será cierto que todo lo sólido se desvanece en el aire? ¿Qué nada se pierde, que todo se transforma?
¿Por qué antes me gustaban los nombres de origen hebreo y ahora no?
¿Vas a dejar que conozca en serio tu alma profunda y caótica?
¿Por qué tantas preguntas y tan pocas respuestas?
¿Por qué antes vos no estabas y ahora estás?
¿Cuánto tiempo va a durar esto?
¿Cuántos próximos habrá?



viernes, 22 de junio de 2012

Cambio

"-De manera que crees haber cambiado varias veces, ¿eh?-. -Me temo que sí, señor- dijo Alicia- no puedo recordar ciertas cosas, como antes. Y además no logro conservar mi estatura ni durante diez minutos seguidos".

 Charles Dodgson, "Alicia en el Pais de las Maravillas"

miércoles, 20 de junio de 2012

20 de junio


“A dream you dream alone is only a dream. A dream you dream together is reality.” J. L.

    20 de junio. 171 días desde que comenzó este año, 194 para que termine (aunque no sé si quiero que termine…). 60 días desde que tus labios se encontraron por primera vez con los míos. Estabas incómodo ese día; yo no estaba mejor que vos (me pasaban muchas cosas por la mente, aunque no lo dijera; era uno de esos momentos en los que se supone tenés que impresionar, aunque no fuese más que por una boludez…). Después de bastantes semanas de contacto estrictamente virtual, había que enfrentar la realidad. Y no era fácil… pero ya van dos meses de “soportarnos”, de alguna manera, van dos meses de enfrentarnos a esta realidad. Y aunque te siga incomodando, sabés que estoy enamorado de vos. Y ESO no va a cambiar (al menos por un largo tiempo..).

    Hoy no estamos en la misma ciudad, pero ¡cómo me gustaría que nuestros cuerpos festejaran juntos este día! Supongo que habrá que esperar una semana más para que volvamos a vernos… Otra vez: tiempo y espacio, siempre presentes en este mundo físico. Pero hay otros tiempos y espacios también. Leo en algún lugar: «Lo que constituye a la imagen-cristal es la operación más fundamental del tiempo (…) Es preciso que el tiempo se escinda al mismo tiempo que se afirma o desenvuelve: se escinde en dos chorros asimétricos, uno que hace pasar todo el presente y otro que conserva todo el pasado. El tiempo consiste en esta escisión, y es ella, es él lo que se “ve en el cristal” (…) Se ve en el cristal la perpetua fundación del tiempo, el tiempo no cronológico, Cronos y no Chronos» (Deleuze). Creo que de eso se trata un poco, ¿no? Vivir los presentes que nos tocan estar juntos, de la mejor manera. Y, mientras, conservar el pasado para no equivocarse y, consecuentemente, para no dejar de caminar juntos.

    Te quiero, Frankie. Mucho. 


martes, 19 de junio de 2012

Maurice

-Hubiera ido medio dormido por la vida su hubieses tenido la demencia de dejarme solo...
-Creo que nos despertamos el uno al otro... 

domingo, 17 de junio de 2012

El lugar del Amor


“Eres la palabra que marca la mayoría de mis textos, la que me gusta usar frecuentemente, cuando llego al éxtasis, y cuando no encuentro que decir, caes de nuevo tú, mi palabra, mil preguntas, mi excusa." (De algún lugar en la web…)

Antes de que
el paso inexorable del tiempo
deshaga el recuerdo tierno de
estas horas que pasé con vos,
juego con la ilusión de
retenerte en estas palabras…
No es nuevo esto…
siempre repito el mismo juego desde que
despedirse es una herida cada vez:
retenerte en el sonido y la letra de alguna canción
que escucho y tarareo (con mayor o menor éxito),
en alguna línea que leo o escribo,
en alguna imagen que viene
–precipitada– a mi mente
cuando cierro los ojos
sin pensar en nada más,
en algún aroma que percibo y
me trae algo de tu piel
o de tu respiración y
me deja como en stand by
Confieso que esto funciona
algunas veces (NO siempre…).
Funciona mientras sepa que
habrá una próxima vez,
una próxima vez que no
sea pura ilusión e imagen espectral,
espectro que se escapa como el viento
entre las hebras débiles de un atrapasueños,
que se desvanece como esas letras
dibujadas vagamente
sobre un vidrio empañado
por el vapor de la partida.
Es lo que voy a intentar en estos días
hasta que llegue el momento de
verte y sentirte cerca otra vez:
las sábanas, el agua que derrama
amenazante sobre los cuerpos,
los rulos desgarbados,
las canciones que escuchamos juntos
mientras nos besábamos
frenéticamente, sin vergüenza,
los tequieros, los teodios, los no-no,
cada centímetro de este espacio
pequeño que ocupaste durante
algo más de treinta horas…
Voy a tratar de retener todo eso,
eso que vos también querías:
“¿No se puede conservar este
momento para siempre?”.
Quiero intentarlo para
no disolverme hasta la próxima.
Confiá en mí. Yo confío en vos.
Siempre se vuelve al lugar del Amor.


jueves, 14 de junio de 2012


“…no cabe esperar que aquello que permanece sea lo mismo, pues el solo hecho de su repetición ya lo hace diferente; es decir: en la repetición, lo mismo vuelve como diferente.” C. B.

El contador es exacto
(o al menos eso parece:
en un mundo inexacto,
¿puede haber contadores exactos?,
¿acaso eso importa realmente?).
En este instante
van cincuenta y tres días,
trece horas, cinco minutos
y cincuenta segundos
desde esa tarde-noche
de aquel viernes húmedo  
y resistenciano en que
el tiempo decidió
no esperar más
(un viernes más
pero diferente…).
Estabas ahí sentado
(lo recuerdo bien…),
escuchando música,
abstraído del mundo,
fuera de este mundo...
(de algún modo, siempre supe
que vos no eras de este mundo,
estabas/estás más allá…).
Por eso no supiste que
antes de desconectarte
y bajarte a esta realidad
por un momento
yo había estado observándote;
un haz de luz solar
hacía de la escena algo irreal,
la fragmentaba en cientos
de porciones diferentes,
caleidoscópicas,
y eso te hacía más inasible…
Después de un saludo indeciso
nos cruzamos a ese bar,
el tiempo corría sin cesar
mientras las botellas se vaciaban.
Tu mirada, tu sonrisa, tus “no no”
me obsesionan desde entonces…
Me obsesiona cada encuentro,
cada nueva ocasión…
Noche-garage, Camba Cuá,
2 de Febrero, Battle Ship,
Mitre y el hombre elefante...
Hay algo iterativo en todo esto
pero cada vez es diferente…
CADA VEZ ES DELICIOSAMENTE DIFERENTE…


lunes, 11 de junio de 2012


Lunes. No es ni muy temprano ni muy tarde. Me levanto para empezar de nuevo la rutina de cada semana. Sin muchas ganas, como todos los lunes. Pienso en vos. Pienso que anoche volví a soñar con vos (no importa qué, sólo que eras vos, otra vez…). Enciendo la net, sin salir de la cama. Recorro los sitios de siempre: facebook, twitter, algunos diarios virtuales, mi blog, aulas virtuales… No me olvido de stalkear tu muro, tus tuits, tus favs (el famoso “TL”). Me sonrío por algunas publicaciones. No me olvido de tu sonrisa (esa que decís que no tenés...). Me acuerdo que ayer te dije que hoy empezaba la semana laboral y que como cada uno estaría muy metido en sus cosas no iba a haber tiempo de pensar en boludeces. Eso me da un poco más de ganas de arrancar: pensar en no pensar. Leo el capítulo de un libro que tengo hace unos días en la mesa de luz. Después, me levanto. Y arranco. Espero que sea un buen lunes. 


domingo, 10 de junio de 2012

Silencio


El silencio de esta mañana de domingo es infinito
se parece al reflejo de tu silencio
que me enajena desde anoche

Anoche, cuando me dormí pensando en vos
y soñé
el ritmo pausado de tu respiración
(tu rostro sobre mi cuello)
el pulso incesante de tu corazón
(mi mano sobre tu pecho)
cada centímetro de tu piel
(el roce cálido de la materia)
cada facción, cada ángulo, cada recoveco
el breve espacio de tu cuerpo
que, ahora, en esta mañana de junio
no puedo poseer, fatalmente…

Anoche te soñé y así pude tenerte
al menos durante unos instantes
No sé por qué pienso en ruinas circulares
No quiero una repetición de esa calamidad

Pero el silencio se expande, desde anoche… 

jueves, 7 de junio de 2012

Abismo


escucho una canción
no le tengas miedo al abismo dice
modo reproducción continua                
entonces resuenan las palabras de
un tiempo mejor
qué lástima que tengas que irte
ahora al mediodía
dale decímelo ahora que no te veo
me encantás
de quién me abuso de vos me abuso
y juntas vienen otras
las de un tiempo todavía ignorado
la angustia y la ansiedad del no saber
cuesta desasirse de eso
un día gélido de este otoño chaqueño que
se mete hasta las vísceras y estremece
como se estremecen la carne y el alma cuando
tu mano y la mía
se confunden delirantes
en esas madrugadas frenéticas
de sudor, sangre, saliva, piel que
son abismo 
                barranco 
                             precipicio
                                           pendiente sin fin
la caída libre es tentadora 
y al final se goza eso de pender
al borde de este averno pasional 



lunes, 4 de junio de 2012

Something can’t be found on the main drain...

say, come over here,

let me smell you for one last time
before you go out there
and ruin all of the world, once mine...


me gusta jugar con la idea de que hay momentos que son nuestros... saberte un poco mío, saberme un poco tuyo... 

¿Te puedo decir "Amor"?


Me gusta la ansiedad de la espera, de saberte lejano y cercano cuando vamos a encontrarnos
Me gustan las travesuras a las que me estás acostumbrando, como un niño terrible
Me gusta estar en la cornisa de las normas, pararnos ahí los dos y juntos mirar el mundo,
                                                                                                                                                  como indiferentes
Me gusta saber que tu olor, tu calor, tu pelo, tu sonrisa y tus labios son un poco míos algunas veces
Me gusta cada segundo que tu mirada se posa sobre la mía y me inquieta-tranquiliza
Me gusta cuando el silencio se posa sobre nosotros y no hay más que tocarnos sin escrúpulos
Me gusta cuando tu mano se entrelaza con la mía y me deja sentirte muy adentro
¡Me gustás tanto cuando te beso y te abrazo! (momento deseado...) 
Y, después de todo eso, me gusta escuchar el silencio y tu respiración, ya no mío sino de Morfeo
Me gusta disfrutar de los momentos con el Frankie que estoy conociendo y recorriendo
Aunque también me gusta cuando Frankie deja de ser un poco Frankie y es sólo Amor
Me gustás demasiado, Amor…
¿Te puedo decir “Amor”?