“A dream you dream alone is only a dream. A dream you dream together is
reality.” J. L.
20 de junio. 171 días desde que
comenzó este año, 194 para que termine (aunque no sé si quiero que termine…). 60
días desde que tus labios se encontraron por primera vez con los míos. Estabas incómodo
ese día; yo no estaba mejor que vos (me pasaban muchas cosas por la mente, aunque
no lo dijera; era uno de esos momentos en los que se supone tenés que
impresionar, aunque no fuese más que por una boludez…). Después de bastantes
semanas de contacto estrictamente virtual, había que enfrentar la realidad. Y
no era fácil… pero ya van dos meses de “soportarnos”, de alguna manera, van dos
meses de enfrentarnos a esta realidad. Y aunque te siga incomodando, sabés que
estoy enamorado de vos. Y ESO no va a cambiar (al menos por un largo tiempo..).
Hoy no estamos en la misma ciudad,
pero ¡cómo me gustaría que nuestros cuerpos festejaran juntos este día! Supongo
que habrá que esperar una semana más para que volvamos a vernos… Otra vez: tiempo
y espacio, siempre presentes en este mundo físico. Pero hay otros tiempos y
espacios también. Leo en algún lugar: «Lo que constituye a la imagen-cristal es
la operación más fundamental del tiempo (…) Es preciso que el tiempo se escinda
al mismo tiempo que se afirma o desenvuelve: se escinde en dos chorros asimétricos,
uno que hace pasar todo el presente y otro que conserva todo el pasado. El
tiempo consiste en esta escisión, y es ella, es él lo que se “ve en el cristal”
(…) Se ve en el cristal la perpetua fundación del tiempo, el tiempo no
cronológico, Cronos y no Chronos» (Deleuze). Creo que de eso se trata un poco, ¿no?
Vivir los presentes que nos tocan estar juntos, de la mejor manera. Y, mientras,
conservar el pasado para no equivocarse y, consecuentemente, para no dejar de caminar
juntos.
Te quiero, Frankie. Mucho.
No hay comentarios:
Publicar un comentario